Hace poco tuve la oportunidad de hacer una visita a una colección de Rolls Royce, lo cierto es que fue francamente interesante, y fruto de ello me gustaría compartirla con vosotros.

Se trata de la mayor colección de Rolls Royce que hay a nivel mundial. Para los aficionados al motor, esto es algo interesante y bonito de ver, y tanto para los que somos, como para los que no lo son, no deja de ser una oportunidad de conocer algo sobre la historia del motor, algo sobre una de las mejores marcas a nivel mundial, algo impresionante, ya que no es sencillo ver alrededor de 80 vehículos de la mítica marca Rolls Royce.

Para comenzar veamos de cerca a la «Diosa del Extasis»

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Tuve la oportunidad de ver el único modelo de ver el único modelo de Rolls Royce que incorpora una calandra horizontal, inicialmente la firma comenzó con 8 paneles soldados entre ellos, para pasar posteriormente a mostrar su mítica calandra vertical, sin embargo un modelo, y solo uno, salió con la calandra horizontal, aquí lo tenéis

La colección dispone de un modelo muy exclusivo, de este modelo solo se fabricaron 18 unidades, 17 de las cuales están en el mercado, y la 18 la tiene la firma. 3 de ellas están en España y son considerados bienes nacionales, los adquirió Franco en su momento, y hoy los tiene la Casa Real. Este es uno de los modelos que más costó adquirir a la firma. Se trata de un Phantom IV, el cual mide algo más de 6 metros de longitud.

La colección dispone también de algunos modelo que han pertenecido a la Casa Real Británica, un modelo que sirvió de correo a finales de la primera guerra mundial y algún otro Phantom IV.

 

 

 

 

 

 

 

La visita a la exposición resulta muy enriquecedora, comienza con la historia de Rolls y Royce, dos personas que se unieron para crear la mejor marca de coches del mundo, al menos está era su visión. Durante la exposición se cuenta la historia de como se incorporaron la calandra y la diosa del éxtasis a los coches, ya que Rolls no era partidario de ello por reducir la atención prestada al coche, decía que la gente miraba esto en lugar de mirar el coche. Del mismo modo se cuenta como se fabrican de modo absolutamente artesanal estos vehículos, los cuales tienen unas 400 horas de montaje, y como el material de los mismos tiene diferentes procedencias, pieles de países del norte, maderas de California, … Una de las curiosidades es que por cada pedido se fabricaban dos vehículos, uno para el cliente y otro para la firma, esta era la forma que la marca tenía de asegurar que en el caso de tener que cambiar una piel, o una madera, la textura, la beta de la madera, los colores, …, eran idénticos.

Como os digo, él paseo por la exposición es simplemente fascinante, se muestran una gran cantidad de vehículos, aquí os dejo una muestra de algunos de ellos, incluyendo un motor de un modelo de hace algunos cuantos años.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

No me gustaría finalizar sin antes mostrados un modelo con volante de marfil y apliques en oro. Más allá de ello, este modelo representa la preocupación de la firma por la comodidad de la conducción, tiene un sistema absolutamente manual que permite elevar o descender los faros, es decir, lo que hoy conocemos como luces cortas y largas. Asistir a la exposición te demuestra que el equipo de Rolls Royce fueron pioneros en muchas de las cosas que hoy son habituales en los coches, durante los años se dedicaron simplemente a perfeccionar los coches.

 

 

 

 

 

 

 

 

Espero que este pequeño acercamiento a la exposición de Rolls Royce os haya resultado tan interesante como a mí, lógicamente no es lo mismo vivirlo en vivo que ver las fotos, pero …

Un saludo y hasta pronto.

Luis.